En la jornada del jueves se celebra el Día Internacional del Agua, y el mismo se originó ante la Resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas en diciembre de 1993, por la que el 22 de marzo de cada año fue declarado Día Mundial del Agua, a celebrarse a partir de 1993, en conformidad con las recomendaciones de la Conferencia de la Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo contenidas en el Capítulo 18 (Recursos de Agua Dulce) de la Agenda 21.
En el mencionado capítulo de la agenda se establece entre sus párrafos que: “…El cambio climático mundial y la contaminación atmosférica podrían también tener consecuencias para los recursos de agua dulce y su disponibilidad y, con la elevación del nivel del mar, poner en peligro las zonas costeras bajas y los ecosistemas de las islas pequeñas…” y continúa advirtiendo que: “… El agua se necesita en todos los aspectos de la vida. El objetivo general es velar por que se mantenga un suministro suficiente de agua de buena calidad para toda la población del planeta y preservar al mismo tiempo las funciones hidrológicas, biológicas y químicas de los ecosistemas, adaptando las actividades humanas a los límites de la capacidad de la naturaleza y combatiendo los vectores de las enfermedades relacionadas con el agua. Es preciso contar con tecnologías innovadoras, entre ellas las tecnologías locales mejoradas para aprovechar plenamente los recursos hídricos limitados y protegerlos contra la contaminación…”
En nuestra Región este día no puede pasar por desapercibido atento las características que presenta, en donde desde algunos sectores Gubernamentales desgraciadamente no se aprovecha, dado que podría ayudar a tomar conciencia sobre la importancia de preservar y no degradar este Recurso Natural.
Esta importancia Regional que resaltamos, no es un hecho caprichoso ya que habitamos a la vera del Rio de la Plata y los distintos arroyos o canales que desembocan en él que recorren las distintas ciudades, sumado a la presencia de los humedales costeros que cumplen también como función la recarga de nuestras aguas subterráneas.
En el presente y desde hace años nuestro Recurso hídrico está siendo víctima de distintas agresiones en forma directa o indirecta teniendo como resultado una degradación significativa, y poseemos muchos ejemplos como son: los constantes vuelcos de líquidos cloacales sin tratamiento desde supuestas Plantas de Tratamiento (Berisso) o las abandonadas (Absa en Mercado Regional La Plata), los vuelcos de los camiones atmosféricos, de la CEAMSE y de las sustancias químicas sobre arroyos como El Gato, Canales Este y Oeste, el dragado sin contralor del propio Estado (Río Santiago), utilización de agua dulce para enfriamiento de Usina termoeléctrica Ensenada y la calidad del agua que consumimos en la Región, todo ello son hechos reales y que menoscaban la calidad de nuestro Río y Arroyos que luego son los proveedores del agua que cada uno adquirimos.
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